viernes, junio 23, 2023

Improvisar en forma "libre" vs tocar sobra la "forma" No.2

 Seguna entrada sobre este mismo tema. Por haber estado escuchando el  disco Functional Arrythmias  por Steve Coleman y Five Elements,  me encontré leyendo una extensa entrevista que me pasó Valentin. De la misma manera comparto el link que me envió: 

https://m-base.com/interviews/improvisation-correlation-and-vibration-an-interview-with-steve-coleman/

El documento  está en inglés es larguísimo. Me llevó varias tenidas hasta completarlo. Yo diría lo que a mi me interesó particularmente lo que desarrolla hasta la mitad de su extensión. Steve Coleman es un músico con mucha formación, yo diría un erudito, aunque no es un académico. Polemiza con los académicos, en particular con los que escriben sobre música sin ser músicos. Lo que puedo extraer tiene mucha relación con lo que quise decir en el posteo anterior sobre la "forma" y las restricciones. Para empezar Coleman y el colectivo M-Base , cuyo liderazgo algunos le adjudican, es un buen ejemplo de la deriva hacia la composición que estábamos comentando. Su entrevistador (Johannes Völz) también es bastante astuto, y encuentra formas de repreguntar de un modo que expone contradicciones,  sin contrariarlo, a la vez que lo conduce a exponer gran parte de sus conceptos. Voy a glosar algunas de ellas que vienen a cuento de nuestro tema. Coleman disputa la idea de "libertad", en el sentido que cualquier intento de deshacernos de los condicionamientos culturales que nos habitan. En ese sentido es bastante "lacaniano" en la medida que toda subjetividad se constituye desde un Gran Otro. En lugar de libertad, prefiere la idea de opciones, o de otra manera, que dentro de una matriz determinada por una estructura, se puede optar por llegar a un punto de encuentro por distintos caminos. Otra noción que critica es el ideal de hacer algo "nuevo".  A la vez que le otorga una lugar central a lo epocal, prefiere una idea de originalidad que se entrelaza con la determinación histórica. Desde esa perspectiva, no cree que se pueda ejercer una hermenéutica por donde "entender" lo que se  hizo en el pasado. Toda apreciación de la tradición está teñida por los parámetros que habitan al intérprete en su presente. En ese sentido es notable como su música, a la vez que puede ser de difícil apreciación, remite invariablemente a la tradición africana. El entrevistador le propone comentar el quehacer musical entendido como un lenguaje. Coleman remite todo lenguaje al termino comunicación, a la vez que lo condensa en lo gestual. Ahí me parece que tropieza con cierta ingenuidad respecto de la noción de lenguaje, en la medida que la comunicación es sólo una función del lenguaje. Claramente su intento de teorizar no está fundada en el estudio de la lingüística, y en ese sentido cae en algunas de las fallas que endilga a los teóricos y críticos que escriben sobre música. Pero eso no desmerece su amplio compás discursivo, a la vez que reconoce la necesidad de entender la práctica musical como un craft (manualidad/artesanía) que requiere una laboriosa tarea de aprendizaje, escucha y estudio. Y claramente su música es testimonio no sólo de su análisis conceptual, sino de su esfuerzo en la disciplina musical. 

lunes, junio 05, 2023

14-15-16 de Abril. Edición 34 de Jazz en Abril.

 Con bastante atraso, hago esta entrada dedicada al evento que hace 34 años que se realiza anualmente, y que en sus últimas versiones es sostenida por el ímprobo trabajo de Sole Curien, Pablo Espinosa, y Aldo Roldán. Era una ocasión que para mí tenía la misma importancia que Navidad, y que en alguna oportunidad (2001) lo organicé solo aunque en una versión reducida, dada la crisis que en ese momento casi parte al país. Tuvieron la amabilidad de volver a invitarme para esta edición, probablemente por tener en cuenta mi asistencia perfecta en festivales anteriores, pero debí inventar un grupo ad-hoc para presentar ya que no tenía conjunto grupo activo en el momento. Quise aprovechar para volver a tocar un poco de jazz tradicional, y convoqué a Martin Santos (clte) Julián Tavela (banjo) y Martín DeLassaletta (contrabajo) para preparar un repertorio en apenas un ensayo. Contamos con algo de lo que ya tocamos con la banda Bocaguasa, pero tanto Martin Santos como Martin DeLassaletta tuvieron que adaptarse muy rápidamente para ponerse en forma. Así armamos un repertorio de algunos temas clásicos del período Armstrong/Oliver, pero también quise agregar algunos temas de tradición folk o de antecesores del jazz que tomó forma a partir de 1920.  Eso me retrotrajo a a 1974/5 cuando formamos la Criolla Jazz Band. En aquella época hacíamos un intermedio de temas skiffle o folk, en el medio de nuestro set de clásicos. Sin duda yo estaba influido por la filosofía musical de Cacho Rodriguez Jurado, que en lugar de interesarse por el "progreso" buceaba cada vez más atrás en el tiempo, en lo que eran las raíces afroamericanas del jazz. Tengo que remontar un prejuicio del tipo "nunca segundas partes fueron buenas", pero me parece que voy a insistir un poco en esa dirección. Hoy ya desapasionado y, creo, menos afectado por prejuicios, puedo agregar ese color a nuestra paleta. Se trata de investigar un poco en los blues campestres, los cantos de trabajo y los spirituals, con la idea de que todos aportan a lo que es nuestra música hoy.