jueves, enero 26, 2017

Bastián & Bastiana

Miércoles 25 de Enero 2017-Jardines de Villa Victoria. Bastián y Bastiana - (Ópera de Wolfgang Amadeus Mozart)- Belén Baldino (soprano)- Facundo Marzano  (barítono)- Miguel Silva Macías (tenor) -  Francesco Paganini y Beatrice Lupi (Dirección musical y piano)-  Adriana Padra (Escenografía y vestuario) 
Pablo Gonzalez Aguilar (Dirección general)

Me apresuro a registrar mi asistencia ayer a la última producción del realizador Pablo Gonzalez Aguilar, una ópera que Mozart habría compuesto a los 12 años. 
Insisto en mi ignorancia sobre el género lírico, pero a fuerza de asistir a las puestas de Pablo voy adquiriendo rudimentos de apreciación. La sencillez armónica de un clasicismo temprano no lograba despejar mis dudas de que el jovencito Mozart pudiera contar con las  habilidades técnicas necesarias para componer la pieza. La obra tiene su obertura, varias arias, solos, dúos, y una aria a tres voces hacia el final. Pero lo que más alimentaba mi sospecha fue que el argumento tiene todos los ingredientes picarescos que excederían la visión  de un púber del siglo 18.  
Una pequeña investigación me mandó de un cachetazo al rincón del burro. En internet se encuentra toda la data de cuándo fue comisionado, por quien, y de donde se extrae el libreto. (Tenía que ser un trompetista, un tal Andreas Schachtner, quien hiciera la revisión del guión alemán).
Así que....precoz,  muy precoz, el muchachito Wolfgang. 

Todo conspiraba contra la puesta anoche, pensada para lucir el bello entorno de la Villa Victoria.  Hacía frío, algo de viento, sonido parasitario de una banda de rock desde la cercana Villa Mitre. En algún momento ¡hasta cayeron algunas gotas de lluvia!. Sin embargo se presentó un público numeroso, con un importante componente infantil. La presentación se llevó adelante con gran ánimo, profesionalidad, y sobre todo, humor. Pablo G.A sorprendió con dotes de actor al adoptar el rol de presentador, con peluquín, maquillaje y lunar. Desarrolló una suerte de libreto paralelo en la que a la par de divertir, tuvo una bien disimulada intención didáctica, sin condescendencia. En un momento se recurrió a pequeños "aprendices" que se sumaron entusiasmados al escenario para colaborar con la pócima del mago.

La parte musical fue aportada por dos pianistas, nuestros ilustres visitantes italianos Francesco Paganini y Beatrice Lupi, con el agregado desopilante de que ésta última doblaba en el papel de la Condesa que pretende seducir al cándido Bastián. 

El texto se cantó en su integridad en castellano y fue refrescante no depender de el subtitulado electrónico. Me han dicho que la traducción y adaptación fue labor del director.  La soprano Belén Baldino encantó con su interpretación de Bastiana. Su afinación y musicalidad me cautivaron.  El barítono Facundo Marzano hizo un papel que resaltaba el humor del personaje con pequeñas pero oportunas intervenciones espontáneas. Se destacaba la claridad de su dicción.  Sigue el crecimiento del tenor Miguel Silva Macías, que parece haber ganado mucho en confianza y soltura actoral.
La escenografía y el vestuario (Adriana Padra) se sumaban a la realización de una puesta austera pero singularmente bella.