miércoles, abril 26, 2023

Improvisar en forma "libre" vs. tocar sobre la "forma"

 El título sólo intenta encuadrar el tema en un lenguaje simple, aunque equívoco. En primer lugar nunca se es tan "libre" , tocando, asociando, o escribiendo poemas. Hay una determinación que se entromete, por más que nos ilusionemos románticamente con la libertad. Por otro lado, por más que se pretenda la más extrema espontaneidad, lo inusual, lo imprevisible, eso, una vez realizado, tiene una forma. Prefiero adoptar una terminología algo más ajustada. Podría ser lo no-reglado en oposición a lo reglado.  Por cierto hay maneras de hacer arte que responden muy estrictamente a reglas, y otras que pretenden romperlas. Algunos pueden pensar que es el modo en que se "progresa" en el arte. En el constante movimiento hacia la disolución de las constricciones estilísticas, se piensa que se evoluciona hacia formas más actuales. Se trata en realidad de un debate complejo, en la que intervienen otros factores: epocales, de tendencia o de moda. Otro modo de pensarlo es que en los distintos paradigmas estéticos, se manifiestan distintos modos del goce estético.  Nuestra constitución subjetiva nos hace sensibles a ciertos modos de experimentar placer y nos cierra el acceso a otros. O mejor dicho, preferimos tener cierto "gusto" y nos negamos a acceder a otro. Intervienen factores de historia personal, contexto, o ambientes culturales.  No se trataría de que unos fueran mejores que otros, pero si que son diferentes. Es un tema que excede los límites del jazz, o de la música en general. Pero en lo que hace al jazz es casi inevitable preguntarse por la dirección hacia donde se orienta aquello que insiste con esa denominación, aunque alberga música tan distinta con el paso de los años. Personalmente rindo homenaje a los estilos antiguos, a los modos originarios de tocar jazz, básicamente porque fue mi primer acceso a él, y creo que conserva el germen de todo lo que se hizo después. Pero disiento totalmente con los talibanes que denostan  todo lo que se hizo después de 1930, y ni hablar de lo que se toca hoy en día. Me topé con una entrevista que le hacen a Wynton Marsalis en el año 2000 (ref  JazzTimes; Marzo 200) donde le preguntan por acerca de donde cree que se dirige el jazz en el nuevo milenio. A Wynton se lo considera más bien conservador, y por cierto que insiste en diferenciar lo que considera jazz de lo que califica como formas híbridas.  Una definición suya es que en lo que se considera free, la posibilidad de cambio (o "evolución") está limitada.. No deja de tener una mirada algo despectiva, comparando la libre improvisación con el laleo de un grupo de niños que aún no dominan el lenguaje. Pero de concederle posibilidad de crecimiento, no cree que pueda experimentar mucho cambio en 50 o 60 años. Por cierto que lo que se toca hoy en ese rubro no es muy diferente de lo que yo escuchaba en Europa en la década del 70. La cuenta es bastante exacta....50 y pico de años. En cambio aquello que se rige por ciertas normas, o estructura, puede adquirir distintas manifestaciones. Cuando le piden que adivine lo que va a pasar, sugiere que habría menos pasajes solistas, menos improvisación y un vuelco hacia la composición. Y creo que eso se verifica en lo que hacen los músicos del pelotón de punta hoy en día. Por otro lado rescata un término que usaba Duke Ellington, que hablaba de total jazz, queriendo significar que se apele a todos los recursos disponibles, sin dejar de lado ni la estructura ni los intentos por romper moldes pre-establecidos.  

Pero volviendo a la mal llamada "forma", que también podríamos llamar normativo, o reglado, yo creo que aquello que implica restricciones, ofrece una gran posibilidad de cambio. Tomemos por ejemplo el juego de ajedrez, donde las piezas sólo pueden moverse de determinada manera. El resultado es el de casi infinitas combinaciones, y que una partida sea siempre diferente a otra. Los modos de inicio y de cierre son motivo de complejos estudios, y siempre aparecen novedades de las jugadas de sus grandes maestros. Se puede recurrir a ejemplos en el terreno de la literatura y la poesía. Existe el verso "libre" y por otro lado expresiones rígidamente pautadas como son las formas clásicas de los sonetos, o las sextinas, que dictan formas complejas de establecer rimas, o las célebres medidas de endecasílabas. En los tiempos que corren existen otros modos de establecer restricciones. En un artículo de Horacio Martinez, (ref: Relaciones entre la literatura potencial y el psicoanálisis lacaniano) pub. en el IX Congreso Int. de Psicología) donde cita al grupo OuLipo de 1960, surgido de un seminario sobre Raymond Queneau. Sus integrantes se propusieron explorar las posibilidades potenciales del lenguaje, a partir, justamente, de restricciones. Así surgen producciones literarias que multiplican sus posibilidades del clásico soneto en una combinatoria que sigue un modelo matemático.  Otro ejemplo que cita es la de la novela de George Perec. que escribe una novela en la que omite sistemáticamente la letra E.

En conclusión, todo bien con la ilusión romántica de la libertad. No abandonemos el imaginario de la creatividad y apostemos a alguna versión de la inspiración para hacer obra, pero personalmente prefiero moderarla, o combinarla con la restricción que implica un cierto modo de composición. 

miércoles, abril 12, 2023

8-4-2023 - Ritmo Vol IV- en Ecem

Las reuniones denominadas Ritmo en Ecem consisten en la presentación de algún propio del colectivo, para luego dar lugar una jam a la que están invitados todos los músicos que quieran participar. El sábado pasado produjimos su cuarta versión, en la que actué de anfitrión. Mi rol consistió en presentar dos grupos "sorpresa" para abrir la jornada. En primer lugar tocamos unos temas con el cuarteto de jazz tradicional que armé con el objetivo de sumarme al Jazz en Abril de este año, que comienza en pocos días. Luego tocamos unos standards en trío junto a Julián Maliandi (gtr) y Valentin Garvie (tpt). Obviamente mi rol en el trío fue exponer el tema y no mucho más, ya que los otros dos despliegan todo tipo de recursos que me superan ampliamente. Por otro lado fue divertido tocar un poco de jazz tradicional en el hall, una música un tanto dejado de lado por la cultura Ecem, más volcado a lo experimental y contemporáneo. 

Un detalle que realzó el evento fue que el amigo Horacio Sauce cocinó y sirvió pizzas, con lo que aumentamos significativamente la recaudación de la noche.